jueves, 30 de diciembre de 2010

24-04-10

Vengo a pedir perdón a todas aquellas personas que olvidé en algún momento, a las personas que no escuché cuando debí hacerlo, a aquellas a las que no he sabido pedir ayuda cuando la he necesitado, a las que han intentado dármela y yo he rechazado. He de decir que no hay peor ciego que el que no quiere ver, y que todos debemos aprender de nuestros errores. Me arrepiento de todo menos de haberme equivocado, porque al equivocarme he aprendido. He aprendido que las personas que te quieren sólo desean tu felicidad. He aprendido que sólo querían prevenir antes que curar. Que sólo querían que mi corazón no se rompiera en mil trocitos por no abrir los ojos a tiempo. Sólo querían que no sintiera el vacío que siento ahora. Pero sé que tenía que aprender por mí misma, que yo solita tenía que abrir los ojos y darme cuenta. Que cuando no quieres oír ni ver, ni oyes ni ves más allá de lo que tú deseas. Por eso, sólo vengo a decir aquí GRACIAS. Gracias por estar ahí, por intentar que nadie me hiciera sufrir. Por perdonarme todos mis errores. Por no decirme “te lo dije” cuando por fin abrí los ojos. Gracias por todo. A vosotros, que estáis haciendo que vuelva a ser la persona que fui y me arrepiento tanto de haber dejado de ser.

No hay comentarios:

Publicar un comentario